Bajo el lema “El centro ha muerto, viva el centro”
En momentos donde los efectos de la postpandemia están siendo analizados con cada vez mayor precisión, el Goethe-Institut de Buenos Aires lanzó un proyecto para promover un intercambio internacional entre artistas, urbanistas y académicos, cuyo objetivo es reflexionar sobre las convivencias en las urbes del futuro.
Según ellos, además de funciones como redes de vivienda, transporte y producción de bienes o comunicación, las ciudades también deben ser tomados como organismos vivos que digieren, envejecen, se infectan, enferman y mueren.
“¿Cómo necesitamos vivir en las nuevas estructuras urbanas?”, es una de las preguntas que planteará el Goethe-Institut, proponiendo desde el 2 al 12 de febrero una muestra que se llamará “El centro ha muerto, viva el centro”. Será curada por Hernán Kacew en Argentina y Lívia Nolasco-Rózsás en Alemania, quienes seleccionaron trabajos de artistas de Argentina, Alemania, Chile, España y Bélgica.
La exposición, pronta a comenzar, tendrá la intención de despertar espacios vacíos, levantando las persianas de algunos negocios abandonados para volver a ocuparlos transformados en sitios de exhibición de obras de arte visuales, que dialoguen con este presente no planeado expandiendo digitalmente las calles y plazas con la intención de revelar las potencialidades de los espacios públicos.