La exministra de Seguridad en el Gobierno de Cambiemos defendió “el protocolo Chocobar”, una política repudiada por los organismos de derechos humanos, que le permitía a las fuerzas de seguridad el uso de las pistolas Taser.

La presidenta del PRO y exministra de Seguridad en el Gobierno de Cambiemos, Patricia Bullrich, defendió hoy el “protocolo Chocobar” y el uso de pistolas Taser en las fuerzas federales y consideró que la “doctrina” vigente “es letal” para los uniformados.

“El protocolo Chocobar le permitió a las fuerzas de seguridad tener las reglas claras; la derogación de (ese) protocolo y el no uso de las pistolas Taser dejan a la policía en una situación de incertidumbre”, sostuvo la exfuncionaria al ser consultada en una entrevista con la radio La Once Diez sobre el asesinato del policía Rodrígo Roza, cometido ayer en el barrio porteño de Palermo.

Para Bullrich, hoy la decisión de disparar puede llevar al policía “a la cárcel por homicidio agravado o exceso en la legítima defensa, y a perder su carrera”.

“Sabe que lo pueden meter preso porque es la doctrina vigente, y termina muerto. Es el peor de los mundos”, siguió la exministra, quien evaluó que “el cambio de esta teoría es letal para las fuerzas de seguridad”.

La exfuncionaria se refirió así al crimen de Roldán, un inspector de la Policía Federal Argentina (PFA), asesinado por un hombre con un cuchillo en Palermo.

Bullrich se quejó además de que no se incorporara el uso de pistolas Taser (armas de electrochoque) en espacios abiertos y con afluencia de público, donde disparar un arma de fuego sería peligroso.

“Ayer el policía la tenía a mano (su arma reglamentaria) pero no la quiso utilizar, cuando la usó ya era tarde”, lamentó.